
Robert Silva considera que sería un “grave retroceso” eliminar las direcciones generales y volver a un estado de “asamblea permanente”
El senador Robert Silva, ex presidente del Consejo Directivo Central (CODICEN) de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP), habló con EL PROFESIONAL sobre sus perspectivas sobre su transición del ámbito ejecutivo al legislativo, el diálogo social propuesto por el gobierno y la estructura de gobernanza en la educación pública.
TRANSICIÓN DEL ÁMBITO EJECUTIVO AL LEGISLATIVO
Silva posee una amplia trayectoria en roles ejecutivos dentro del sector educativo uruguayo. Ha desempeñado funciones como consejero del CODICEN, director del Instituto de Evaluación Educativa, secretario general de Secundaria y, más recientemente, presidente del CODICEN. Estos cargos implicaron una dedicación intensa, con jornadas laborales extensas y un contacto directo con las diversas realidades educativas del país.
Al asumir su rol como senador, Silva reconoce un cambio en la dinámica de trabajo. Aunque continúa recorriendo el país y manteniendo contacto con la ciudadanía, su labor actual se centra más en el debate, el análisis y la propuesta legislativa, en contraste con la ejecución directa de políticas.
DIÁLOGO SOCIAL PROPUESTO POR EL GOBIERNO
En relación con el diálogo social impulsado por el gobierno, Silva reconoce la inteligencia de la propuesta, resaltando que, a pesar de que un plebiscito anterior no aprobó una reforma constitucional, el gobierno actual supo capitalizar el sentimiento de cambio presente en la sociedad. Expresó incertidumbre sobre cómo el gobierno cumplirá sus promesas manteniendo la estabilidad del país y del sistema de jubilaciones, pero mostró disposición a observar y participar en el proceso.
ESTRUCTURA DE GOBERNANZA EN LA EDUCACIÓN PÚBLICA
Respecto a la estructura de gobernanza en la educación pública, Silva ha expresado su desacuerdo con la posibilidad de retornar a los consejos desconcentrados que existían antes de 2020. Considera que sería un “grave retroceso” eliminar las direcciones generales y volver a un estado de “asamblea permanente” en la toma de decisiones educativas. Silva defiende la reforma implementada durante su gestión, que estableció un único órgano colegiado, el CODICEN, donde los docentes electos mantienen su representación. Esta estructura, según Silva, permite una discusión integral del sistema educativo y facilita la implementación de transformaciones necesarias.
Estas declaraciones reflejan la visión de Silva sobre la evolución y los desafíos actuales del sistema educativo uruguayo, enfatizando la importancia de estructuras de gobernanza eficientes y del diálogo social en la construcción de políticas públicas.