
Arévalo, Plácido Rosas y Laguna Merín serán parte del programa nacional de médicos rurales residentes
Un sueño largamente anhelado por los habitantes del interior profundo está a punto de hacerse realidad. En el departamento de Cerro Largo, las localidades de Arévalo, Plácido Rosas y Laguna Merín serán parte del programa nacional de médicos rurales residentes, una iniciativa que busca garantizar atención médica continua y de calidad en zonas alejadas de los centros urbanos.
El proyecto fue impulsado por el exsenador y actual ministro Alfredo Fratti, aprobado por todo el Parlamento durante el período legislativo anterior, y contó con la dedicación del diputado Federico Preve, así como con la firme voluntad de la actual administración para llevarlo a la práctica.
“Desde la Diputación sentimos una alegría inmensa. Sabemos el significado que tiene para la campaña y los pueblos contar con atención en salud en el lugar”, expresó la diputada Yisela Araujo, destacando el impacto que tendrá esta medida en las familias rurales que durante años debieron trasladarse decenas de kilómetros para acceder a una consulta médica.
La figura del médico rural tiene una larga historia en el país, pero en las últimas décadas su presencia se redujo debido a la falta de incentivos y a las dificultades para radicar profesionales en el interior profundo. El nuevo plan retoma esa tradición con una mirada moderna: propone cargos de alta dedicación, mejores condiciones laborales y la incorporación de herramientas como la telemedicina, que permitirá a los profesionales mantener contacto permanente con especialistas de hospitales de referencia.
Según datos del Ministerio de Salud Pública, en algunas zonas rurales del país existe apenas un médico cada mil habitantes, una brecha que limita el acceso a la atención primaria y retrasa los diagnósticos. La llegada de médicos residentes busca revertir esa realidad, priorizando la medicina familiar y comunitaria y fortaleciendo el primer nivel de atención.
El plan contempla, además, apoyo para vivienda y conectividad, permitiendo que los profesionales puedan establecerse con sus familias y desarrollar su labor de manera estable. En caso de que la localidad no disponga de alojamiento adecuado, se prevé una compensación económica destinada a cubrir los gastos habitacionales. También se promueven instancias de capacitación continua y acompañamiento técnico a través de redes como el Proyecto ECHO Uruguay, que conecta a médicos rurales con expertos de Montevideo y otros puntos del país.
La iniciativa cuenta con el respaldo del Ministerio de Salud Pública, la Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE), la Facultad de Medicina y el Colegio Médico del Uruguay, instituciones que han coincidido en la importancia de llevar la atención sanitaria a todos los rincones del territorio nacional.
El objetivo, según se explicó, no se limita a cubrir cargos, sino a generar presencia médica sostenida, cercana y humana en comunidades que históricamente han debido enfrentar carencias en materia de salud. “Tener un médico en el pueblo significa mucho más que contar con una consulta —señalan los promotores del proyecto—. Es recuperar confianza, acompañamiento y seguridad en el día a día”.
Para Cerro Largo, este anuncio representa un paso decisivo en materia de equidad territorial. Arévalo, Plácido Rosas y Laguna Merín, tres puntos distantes del departamento, contarán con atención profesional permanente, una respuesta concreta a una demanda histórica de sus pobladores.
Con esta medida, el país vuelve a mirar hacia su interior más profundo, reconociendo el valor de sus comunidades rurales y apostando a un modelo de salud más justo, solidario y presente.