Ministerio de Ganadería inició tres obras de pequeño porte en campos de San José
Pequeñas Grandes Obras Rurales es un programa piloto para contribuir con la mejora de la productividad y calidad de vida de los productores familiares, mediante la concreción de infraestructura y mejoras en predios. Además, la iniciativa busca promover el arraigo de los habitantes del campo uruguayo, a partir de la financiación de proyectos por hasta 350 unidades reajustables, entre Ganadería, Mevir y las intendencias.
Este martes 19 las autoridades visitaron tres intervenciones, de las más de 30 previstas, en la zona noreste de San José, primer departamento en desarrollar este plan.
Allí estuvieron el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos; la intendenta de San José, Ana María Bentaberri; el presidente del programa de vivienda rural Mevir, Juan Pablo Delgado; y legisladores del departamento.
Delgado señaló que en San José trabajan y viven numerosos pequeños y medianos productores, a quienes es necesario apoyar para mejorar sus condiciones laborales. Añadió que Pequeñas Grandes Obras Rurales dejará de ser un plan piloto, ya que se incorporó la infraestructura productiva a los nuevos llamados de vivienda realizados por Mevir.
Estas intervenciones son pequeñas obras, pero de gran valor para el trabajador rural, porque cambian sus formas de producir y vender productos, explicó. Asimismo, recordó la importancia de que los beneficiarios estén inscriptos en el registro de productores familiares del ministerio para acceder a este u otros planes.
Mattos, en tanto, la consideró como una experiencia positiva por tratarse de obras muy necesarias que apoyan a los sistemas productivos familiares y el afincamiento de la familia rural. Y agregó: “Los pequeños productores tienen mayores dificultades en acceder a la infraestructura básica, no solo para la producción, sino para su calidad de vida”.
En primer lugar, las autoridades visitaron una quesería que está en etapa avanzada de intervención, en Colonia América, ubicada cerca de ruta 23, en el este de San José.
Es una unidad de 20 hectáreas de producción de queso artesanal en la que se planificó mejorar las instalaciones y recibir las habilitaciones necesarias para asegurar la calidad del producto y cumplir con las normas generales de bromatología.
Luego, visitaron una pequeña sala de ordeñe, ya culminada, en un establecimiento familiar de 10 hectáreas, en la ruta 23. Las autoridades terminaron su recorrido con la visita a un corral de espera de ganado.