Expo Prado 2023

Ministro Mattos: “Tenemos una visión de futuro optimista”. “Tenemos mucha esperanza que así será”

Como es tradicional, el ministro de Ganadería, Agricultura y Pesca, Fernando Mattos, fue el responsable de expresar la posición del Gobierno en el acto de cierre de la Expo Prado 2023.

Mattos comenzó subrayando que el país debió “enfrentar esta circunstancia tremenda que nos ha tocado vivir, la de la peor sequía de la historia y que tanto impacto generó, lo que ya fue referido por el presidente de la ARU” en su discurso previo. “La sequía nos puso en una situación compleja, poco más de un mes después del discurso (de cierre de la Expo Prado) del año pasado en este mismo palco ya estábamos declarando la emergencia agropecuaria”.

“Declaramos la emergencia que era la cuarta que ha tenido que enfrentar este Gobierno desde el inicio de la administración”, que además incluyó a “todo el territorio nacional, cosa que si revisamos todas las declaraciones previas jamás tuvimos un impacto de esta magnitud con todo el país en rojo”, y que “aún está vigente con sucesivas postergaciones”.

“La tenemos vigente hasta el 23 de setiembre”, cuando se van a cumplir 11 meses. “Seguramente nos reuniremos con el comité asesor el 20 de setiembre para disponer qué hacemos hacia adelante”, pero a pesar de “la perspectiva favorable de un año Niño igual entendemos que es conveniente extender” la declaración de emergencia, declaró, porque “cesan las causas, pero no los efectos”.

De todas formas “nada sustituye los efectos en la sequía de esta magnitud, no hay recursos suficientes, pero sí nuestro deber era responsablemente paliar la situación de los productores para que se mantuvieran de pie”, comentó. Para eso, entre otras medidas, se dieron “20.000 ayudas directas a los productores, más de 13.500 productores atendidos. Hubo una avalancha de solicitudes de asistencia del fondo agropecuario de emergencias y vamos a alcanzar a más de US$ 40 millones de asistencia crediticia a través de los sistemas de República Microfinanzas”. Se manejó “un conjunto de medidas coordinadas”.

Tipo de cambio, costo país, déficit fiscal

Sobre el valor del dólar, Mattos dijo que es un tema que escapa de la responsabilidad directa del MGAP y que refiere al equipo económico. De todas maneras, no esquivó el tema. Señaló que “en los últimos 40 años” hemos tenido “períodos más fuertes, otros más prolongados, otros menos, el efecto del atraso cambiario que hoy con justicia y con cierta motivación y realidad reclama la ciudadanía”.

“La prioridad ha sido el combate de la inflación” y con instancias globales inflacionarias, con “Estados Unidos, Europa y las principales economías del mundo alcanzando niveles inflacionarios jamás conocidos”, Uruguay tuvo momentos de dos dígitos, pero “al mes de agosto de este año la tenemos al 4,11%”.

Junto con eso, “el país ha tenido una calificación de riesgo de las mejores de la historia, con un menor riesgo”.

“Sabemos que no somos un país barato no lo fuimos, no lo somos y no lo seremos tampoco; a pesar de eso hemos tenido el mayor flujo de inversión, US$ 10.000 millones de inversión y 40% de la reinversión de las utilidades de las empresas; el año pasado alcanzamos US$ 20.000 millones de exportaciones y bienes y servicios siendo US$ 3.000 de ellos en servicio, de forma que también estamos creciendo en la oferta de dólares en el territorio. También esos fueron elementos fundamentales para ejercer presión sobre la moneda”.

Ante el reclamo del déficit fiscal, Mattos dijo que una “gran meta” del Gobierno es “achicar con racionalización los gastos, pero no nos olvidemos que tuvimos casi US$ 2.100 millones de gastos extraordinarios para combatir el COVID. No nos olvidemos que tuvimos los recursos destinados a enfrentar esta sequía, en más de US$ 50 millones, o el déficit hídrico que se le suman otro tanto de volumen de dinero”.

Hace un mes estábamos con una crisis hídrica en la zona metropolitana, agregó, y con la se quía se “recaudó menos y gastó mucho más para poder paliar la situación”.

Por tanto, “no es un tema de un déficit fiscal estructural y si un déficit circunstancial, que buscaremos revertir para que no ejerza más presión” debilitando el dólar.

Inversiones, inserción internacional, el pacto verde

El ministro enumeró las inversiones en infraestructura “más allá del dólar”, y mencionó rutas, hidrovía, la profundización del canal de acceso al puerto, el tren del centro del país, los puentes, las antenas y fibra óptica de Antel.

Ante el reclamo de mayor inserción internacional que planteó la ARU, comentó que el contexto internacional es complejo, con una polarización creciente, proteccionismo creciente, más tensiones internacionales, una incidencia de los aspectos del cambio climático en la formación de los precios”.

A eso hay que agregar “los componentes ambientales que se pretenden introducir en el comercio y la reciente propuesta del Pacto Verde de la Unión Europea en la side letter (complemento de acuerdo) que recibimos respecto de las nuevas condicionantes para acceder al mercado europeo”.

La propuesta verde de Europa “no debiera estar condicionada a trámites, a burocracias o certificaciones que encarecen el comercio, eso le vamos a transmitir a las autoridades europeas”, aseguró el ministro. La posición de Uruguay es que los países que cumplen con las disposiciones climáticas sean reconocidos y premiados.

Agregó “una breve lista de las habilitaciones o mercados conquistados durante este año: Sorgo a China, lácteos y carne aviar a Arabia Saudita, carne a El Salvador, colza a China y México, ganado en pie a Marruecos, carne aviar a Líbano, lengua bobina a Japón, arroz cáscara a Guatemala, arroz a Ecuador, flores y biomasa de cáñamo a Costa Rica, carne bovina y ovina a México recientemente autorizado”.

Sobre Brasil dijo que “hoy es nuestro principal socio comercial desplazando a China. Hemos tenido algunos problemas del punto de vista del tránsito de los lácteos, donde allí nos hemos entrevistado con el ministro brasileño para aclarar la situación y darle garantías, y solicitarle garantías que las muestras que están siendo verificadas en la frontera sean hechas de acuerdo con los protocolos del Mercosur”.

“Tenemos una agenda importante de misiones hacia adelante en los próximos meses”, anunció”.

Sobre el final de su discurso, el ministro habló de optimismo y que el contraste negativo que tuvo 2023 respecto a 2022 se va repetir, pero de forma positiva en 2024: “Tenemos una visión de futuro optimista, el contraste es tremendo del año pasado para este y lo será para el próximo. Tenemos mucha esperanza que así será”.

Para lograrlo “tenemos por delante 532 días (al sábado 16), el presidente (Lacalle) tiene el reloj de la cuenta regresiva”, dijo en referencia a los días que restan para el cambio de presidente.